Hoy se cumple un año

Me había preguntado tantas veces: ¿Cómo voy a hacer para vivir sin ella?

Veía tan lejano ese día, sentí que nos quedaban años, mi teoría decía que nos quedaba toda una vida.

Nos vi paseando juntas siendo viejitas , pensaba que cuando yo tuviera 50 años vos ibas a tener 68 años nos veía peleadoras y cascarrabias.

Te vi recuperando esos años que te lamentaste tanto que perdiste, cumpliendo tus sueños, llegando a la meta.

Te vi siendo la mujer más feliz porque la vida te devolvió todas las lagrimas que derramaste en mil sonrisas.

Te vi con papá de la mano caminando siendo muy mayores, te vi retándolo porque iba a ser de esos "viejitos insoportables" como siempre decías.

Te vi en años, te vi siendo mi mejor amiga por siempre. Te había idealizado siempre en mi vida, pero nunca pensé que en mi corta edad me iba a tocar verte dar el último suspiro aferrada a mi mano y después con un respirador que te mantuvo casi siete horas con vida. Nunca imaginé que iba a verte en un cajón a tus 42 años.

Esos meses te vi pelear y sufrir tanto , no merecías nada de lo que paso, vos no. Vos no merecías ese final.

La vida , la vida tan injusta.

La vida que muchas veces llega a ser tan dura , tan despiadada

Cuando me tocó despedirte las preguntas me atormentaron.

¿Por qué vos? ¿Por qué la gente mala seguía tan viva, tan feliz? ¿Por qué mis violadores están vivos y mamá no? ¿Por qué no pudiste vivir más años? ¿Por qué a la gente buena le pasan cosas tan malas? ¿Por qué siempre nos toca sufrir tanto? Le pregunte a Dios ¿Por qué no te salvó? ¿Por qué?

No podía dormir porque no encontraba ninguna respuesta y el recuerdo de tu rostro sin tu esencia , ya dormido , ya lejos de este mundo tan podrido , me desarmaba en mil pedazos.

Hoy se cumple un año, mami.

No encontré una respuesta a alguna de todas mis preguntas, todavía no. Solo sé que sigo armando los pedazos que quedaron de mi.

Hay días que ya no quiero seguir.

Hay días que no me quiero levantar más de la cama.

Hay días que deseo volar a tu lado para fundirme en tus brazos.

Hay días que los pedazos que quedaron se convierten en pedacitos más chiquitos y me convierto en un rompecabezas que le faltan piezas. 

Pero en esos días el recuerdo de tu sonrisa tan blanca con esos dientes tan hermosos que te caracterizaban hacen que me pare un segundo, retroceda en el tiempo y recuerde cada una de tus palabras , cada una de tus lágrimas para levantar a tu hija depresiva y desahuciada.

Recuerdo tu lucha y mi lucha por mantenerme viva. No fue en vano mi pelea y mucho menos lo fue la tuya, entonces me sacudo el polvo después de revolcarme en mis tristezas, respiro hondo y vuelvo a empezar.

Estos 365 días te busque en cada rincón de este mundo y también trate de volar , de escapar, de no pensar porque el dolor muchas veces me tiro a matar.

Nada es fácil desde que no estás. Nada es lo mismo.

Pero acá estoy, sigo aprendiendo a vivir sin vos.